VIRGILIO
Publius Vergilius Maro nació en Andes, cerca de Mantua, el 15 de octubre del año 70 a. C., siendo cónsules Pompeyo y Craso. Murió en Brindisi el 21 de septiembre del año 19 a. C., a los cincuenta años de edad. Hijo de campesinos acomodados del norte de Italia, su nombre completo parece revelar un lejano origen etrusco.
Su educación:
Sus padres proyectaron para él la carrera de abogado o de político.Estudió en Cremona bajo el grammaticus lengua y literatura. En el año 55 a. C. tomó la toga viril y partió hacia Milán donde completó su formación gramatical y literaria recibiendo instrucción en lengua y literatura griegas. No mucho después, quizás hacia el 54, se trasladó a Roma para iniciar los estudios de retórica que le permitieran ejercer como abogado pero finalmente no actuó como tal, debido quizá a su carácter tímido y reservado y a que no poseía gran facilidad de palabra. Por entonces componía poesías y posteriormente abandonó sus estudios de elocuencia para dirigirse a Nápoles a fin de consagrarse a la filosofía en el círculo del epicúreo Sirón.
Sus obras:
A partir del año 42 a. C., los datos de que disponemos acerca de Virgilio no sólo proceden de fuentes externas como biógrafos, comentaristas etc., sino que pueden obtenerse también de la lectura de sus obras .
Las Églogas o Bucólicas fueron compuestas entre los años 42 y 39. Virgilio intenta aclimatar en el jardín de la poesá latina, aún no demasiado poblado, un nueva planta, la bucólica del griego Teócrito. Puso manos a la obra pero las difíciles circunstancias por las que atravesaba Roma, más su propia situación personal - pérdida de sus propiedades- influyeron profundamente en sus poesías. Lo que comenzó siendo un género escapista y poco problemático, un mundo poético auto-suficiente e incontaminado, terminó admitiendo en su interior nuevas producciones que lo alejaron cada vez más del modelo griego y de su diseño primitivo de bucólica.
Las Geórgicas le llevaron siete años de trabajo. Fueron compuestas en Nápoles y, de las alusiones a las victoriosas campañas de Augusto, se deduce que estaban concluidas antes del 29. Por la época en que escribió el poema, Virgilio ya pertenecía al círculo de Mecenas. Este intelectual y político, descendiente de reyes etruscos, poesía una sagacidad excepcional para captar talentos y unirlos en una tarea política común. Mecenas, quien le sugirió escribir la obra, y Augusto, jefe supremo del estado romano tras la batalla de Accio, fueron los únicos contemporáneos citados en el poema. Frente a las Bucólicas el tema de las Geórgicas ganó en profundidad filosófica y en altura literaria. Se elogiaba al campo en lugar del paisaje. No era ya la naturaleza sino su modificación por parte del hombre,la cultura , el objeto de Virgilio. Como ocurrirá en la Eneida, Virgilio ejerció en las Geórgicas una imitación múltiple y original de modelos griegos y latinos: Hesíodo, Arato de Solos y Lucrecio están presentes sin lugar a dudas.
La Eneida comenzó a escribirse en al año 30, apenas derrotados Antonio y Cleopatra, y no estaba totalmente terminada en 19 a. C., cuando la muerte sorprendió al poeta. Augusto pasó por alto su última voluntad de quemar la Eneida o quizá lo persuadió en su lecho de muerte para que consintiera en que sus amigos Vario y Tuca la publicaran. En el plazo de un año aproximadamente estos realizaron su trabajo y la obra salió a la luz en torno al 17 sin ningún añadido a los versos incompletos y únicamente con aquellas supresiones que a juicio de los editores también habría realizado el propio Virgilio. Según Guillemin, la intriga de la Eneida, tal como se presenta hoy, reúne ¨unidad, claridad, facilidad en el encadenamiento de los hechos, relato bien construido, bien equilibrado, tan conmovedor para el corazón como satisfactorio para la inteligencia¨. Dicho autor encuentra en el ¨subsuelo de la Eneida¨ cuatro grupos de leyendas: El primero y más antiguo viene de la Ilíada. El segundo grupo es el relativo a los viajes, que han sido comparados con los de Ulises. El tercer grupo, el más complejo de todos, concierne a la prehistoria de la fundación de Roma. Y el cuarto grupo de leyendas se refiere a las guerras que constituyen el tema de los seis últimos libros de la Eneida. El tratamiento de la obra merece un capítulo aparte.
Las influencias:
Se ha comparado la Eneida con una contrucción en la que coexisten, armoniosamente mezclados, dominios pertenecientes al mito, a la leyenda heroica, a la historia, a la religión y a la filosofía. Mas para alcanzar ese grandioso resultado, el autor tuvo que recorrer un camino muy largo. Es preciso, entonces, detenerse brevemente en los que pueden considerarse como sus jalones más representativos. Tales son la influencia de los neotéricos, los principios de los epicúreos y la realidad política.
Cuando Virgilio llegó a Roma en el año 54 encontró en plena efervescencia la llamada escuela neotérica, grupo de poetas cuya figura más representativa era el veronés Cayo Valerio Catulo, fallecido ese mismo año. Aunque no puede sostenerse que Virgilio perteneciera a dicho círculo, puede afirmarse que recibió influencia del credo neotérico. Heredó de ellos, además de los modelos griegos y de cánones y técnicas estéticas, una gran seriedad y una intensa dedicación al oficio de poeta: corregía incansablemente lo ya escrito y desarrollaba una contínua labor limae.
En algún momento, entre los años 54 y 43, Virgilio abandonó Roma para dirigirse a Nápoles donde, bajo la guía de Sirón - un maestro epicúreo-, se dedicó a la filosofía. Bauzá considera que Virgilio presumiblemente se habría acercado a esa doctrina filosófica a través de la obra de Lucrecio. Aunque después aparezca como abandonando un epicureísmo a outrance no significa que el poeta renuncie a todos los principios de ese sistema muchos de los cuales perdurarán a lo largo de toda su existencia. Con todo, la visión dominante sostiene que, en temas como la relación entre filosofía y poesía, filosofía y política o filosofía y religión, Virgilio fue progresivamente abandonando la influencia epicúrea para acercarse a posiciones estoicas, neopitagóricas o platónicas.
El diseño político de la Eneida es muy complejo: al eclecticismo filosófico y a la capacidad integradora de las más variadas influencias poéticas hay que sumar la habilidad política de Virgilio para exaltar a un hombre - Augusto - sin por ello desmerecer al del bando adversario. También debe tenerse en cuenta que las confiscaciones de tierras que siguieron a la victoria de Filipos (42 a.C.) en el territorio de la Galia Cisalpina, fueron un acontecimiento histórico que repercutió decisivamente en la vida de Virgilio, en sus relaciones políticas y en su evolución poética. Esta confiscación supuso, por lo menos, la irrupción brutal de la política contemporánea en su vida privada.
Su muerte:
Virgilio, habiendo terminado la redacción de la Eneida, no se encontraba totalmente satisfecho con lo que había escrito. Un punto lo atormentaba: parte del derrotero de Eneas se desarrollaba en los mares griegos, en la misma Grecia y en Asia. Tratando de evitar decir algo que no estuviese verificado por él mismo viajó a la zona con la intención de recorrerla. Cuando llegó a Atenas se encontró con Augusto y durante una excursión a Megara se sintió enfermo. Su estado se agravó durante el regreso a Italia y murió en Brindis, poco después de haber desembarcado. Era el 21 de septiembre del año 19 a. C. Un amigo grabó este dístico sobre su tumba:
Mantua me genuit; Calabri rapuere; tenet nunc
Parthenope; cecini pascua, rura, duces.
la tierra madre la engendró postrera,
fiera hermana de Encélado y de Ceo,
tan rápidos los pies como las alas:
Vestiglo horrendo, enorme; cada pluma
cubre, oh portento, un ojo en vela siempre
con tantas otras bocas lenguaraces
y oídos siempre alertos .